jueves, 3 de abril de 2008

Sueños

Sólo en ellos nos regocijamos. Pausa en medio de la guerra, paz en tiempos de agitación. Muerte que nos lleva al renacer de un nuevo día.

Libertad.

Es igual que aquella noche en el descanso de la vida en el cual la soledad me embriagó, dejándome seducir por su aroma apetecible y trágico, tal vez fue el no ver a los demás a mi alrededor, mas cuando levanté la vista sólo encontré a una persona y en la tranquilidad de su regazgo pude soñar que siempre estaría a mi lado, protegiéndome y amándome por siempre. Duradera ilusión para tan fatídico desenlace, no quedaba mucho para el amanecer de los tiempos, para regresar al mundo y darme cuenta de que otra vez estaba ahí, dejandome llevar por el fluir de la vida que pasa acariciando como un aire humedo en una mañana de invierno; frío, cortante y furioso, ¿quién es capaz de parar esa interminable corriente que te arrastra sin más dolor ni resentimiento?

Y asi consigo llegar de nuevo a mi soledad, a mi noche de vacío en la que los recuerdos lejanos vienen a mí como una luz en una habitación de oscuridad, me dejo llevar, me dejo seducir de nuevo por mi soledad.

Ahí, en los brazos de Morpheo, tú me llevas contigo a volar, a abandonar este mundo de falsas ilusiones y esperanzas, a elevarme por encima de toda la civilización y la sociedad, a volver a sentarme contigo en un rinconcito prohibido en el que podemos consumarnos hasta que este mundo muera en su avaricia, su ego y su competitividad. Ese momento, que nos pareció no acabar, justo cuando caímos vencidos por esta pasión y este amor que supera todas nuestras espectativas de futuro, que no me deja ver más que a tu silueta dibujada por el mayor escultor sobre la faz, me lleva a perderme por las entrañas de tu ser, para sacar de tí lo mejor de él, y en el preciso momento en el que ese oceano me atrapó ... todo cayó bajo esta luna nueva que se oculta por verguenza a mostrarnos la verdad de todo nuestro pesar, de que a pesar de todo tú y yo no estamos juntos, que todo fue producto de la imaginación de esta bestia llamada mundo,y que todo, absolutamente todo lo que empieza ha de acabar en este baile infinito del tiempo, en el que todo es perfecto miestras el baibén del pendulo del tiempo no se detenga, porque esta ecuación tiene muchas variables, porque todos nuestros sueños pueden ser reales, porque no existe el imposible, porque no existe el inalcanzable, yo volveré siempre a tí.

En la desdicha del despertar de la ilusión y ver el mundo real solemos apreciar la inocencia con las que se construyen los sueños, siempre despojándonos de nuestra realidad para trasladarnos a un plano paralelo, y es verdad que aunque no todos los sueños sean felices, siempre nos hacen mirar a nuestro interior para sacar lo mejor de nosotros en la consciencia de la maternidad de la tierra que nos sostiene y alimenta, para que poco a poco sigamos avanzando y no rendirnos ante la adversidad para que sigamos siempre los dictados de nuestra alma.

Recuerda siempre quién te dio esas alas de libertad para soñar ...